Final feliz

En un período de pases que tuvo rumores desde Sarajevo hasta Shanghai hubo un nombre que desde la primer semana de enero fue una alternativa real en la búsqueda del nueve: Silvio Bosco Frontán, un nombre que da para pasar horas haciendo variaciones, desde Tosco Frontal hasta Bosque Frutal (?) y que en el último mes ha atravesado todas las situaciones posibles.

Decían que su pase estaba acordado antes de emprender el vuelo hacia Montevideo a principios de enero, inmediatamente pisó territorio uruguayo surgieron problemas por la relación entre sus representantes y el Club Atlético Peñarol, Welker dijo que no venia, su pase se complícó, Aguirre insistió, Welker dijo que no venia, su pase se cayó, Aguirre insistió, Paolo Montero pagó y su pase se reflotó. En conclusión, parece que mañana firma y se pone a las órdenes de Diego Vicente que siempre se expresó afín a su arribo.

Mientras se confirmaba el desenlace del caso Bosco, Gerardo Alcoba podía llegar a desesperarse leyendo las informaciones enfrentadas que hablaban de una posibilidad que se pinchaba y volvía a reflotar, aparentemente su pase a Boca Juniors deberá esperar unos meses más. Los hinchas ya habían sacado a relucir dos síndromes, el del “Fin del mundo” yendo al extremo de concebir a Alcoba casi como un Elias Ricardo Figueroa de estos tiempos y en la otra punta el “Al cabo que ni quería”, exagerando al punto de hacer al zaguero responsable hasta del calentamiento global  y olvidando que si Boca demuestra interés en él entonces tendrá su mérito. Alcoba aparentemente no se va y es sin dudas una buena noticia.

Imágen: Foros Primera A