El Vítor

Víctor Haroldo Púa era hasta ayer el líder del proyecto de divisionales juveniles del Club Atlético Peñarol, pero pocos manejan detalles del currículum del nuevo entrenador del primer equipo.

El hombre no ha sido precisamente un futbolista de prolífica carrera deportiva, muestra de ello la dificultad que genera conseguir una fotografía de Haroldo en su etapa con los cortos (?) en la época en que el mediocampo era el hábitat en el que demostraba su clase; supo jugar en varios clubes chicos del Uruguay (Liverpool, Defensor, River Plate, Rampla Juniors, Cerrito) y conseguir algunas experiencias internacionales. En Paraguay defendió a Olimpia y en Argentina al glorioso Mandiyú de Corrientes; al menos eso dice en la Wikipedia, teniendo en cuenta la facilidad de incorporar información errónea en la enciclopedia virtual no resultaría extraño que esto se trate de un intento por desprestigiar a Haroldo. Siendo futbolista de Defensor, participó del Panamericano 1983 defendiendo a la celeste, obteniendo el torneo al vencer a Brasil en la final.

Una vez retirado de la práctica profesional del deporte, siguió el camino de los menos visionarios, en vez de ser contratista y llenarse de plata explotando gente se definió por el arduo y riesgoso oficio del entrenador de fútbol.

Sin lugar a vacilaciones, lo mas destacable de Púa en su versión entrenador se originó a partir del año 1994 cuando se hace cargo de las divisiones juveniles del seleccionado uruguayo, obteniendo resultados más que aceptables (lamentablemente sin consolidarlos con títulos) y encarando un proyecto que tuvo su cima en el mundial Sub 20 de Malaysia colocando a sus dirigidos entre los dos mejores del planeta, siendo superados únicamente por Argentina. Esta etapa tuvo su fin en 2001 cuando, tras la partida de Daniel Pasarella (todo por culpa de Vicente Sánchez (?)), es designado entrenador de la selección mayor, consiguiendo un lugar en el Mundial Corea-Japón 2002.

Su estampa quedó grabada en las retinas de millones de personas el 11 de Junio de 2002, cuando desde el banco de suplentes del Estadio Suwon que compartía con Francisco Casal, emuló el cabezazo que debía darnos un histórico 4 a 3. Se terminó el mundial para Uruguay y se terminó Uruguay para Púa.

Su experiencia en el manejo de los planteles juveniles fue el argumento clave para que en 2004 los dirigentes de Rosario Central golpeen su puerta. El romance duró dos encuentros: perdió 3 a 1 con Arsenal, marchó 1 a 0 en el clásico rosarino y se fue; el resto es historia conocida.

“Primero vamos a ver que es lo que sucede con Púa, pero no descarto que pueda quedar (…) Nosotros no tendríamos ningún inconveniente de que Púa siga" – Esc. Edgar Welker en Ovaciondigital.

“Víctor va a continuar, pero queremos que vuelva al cargo que tenía. (…) No queremos debilitar el proceso que se viene realizando” – Juan Pedro Damiani en Sport 890.

EXTRAS: - Parece que se solucionó el tema Orteman y mañana sería presentado oficialmente. | – ‘Los Rodríguez’ (?) Braian y Darío cumplen sanción el sábado y no juegan contra Tacuarembó | – La lesión del ‘Pollo’ (desgarro) le demandará al menos veinte días de recuperación.

Foto: La Nación