"Veinte de Diciembre. Acá hace frío, allá calor. En los dos lugares esperamos navidad. Acá lo celebramos con mariscos y en familia; allá asadito, familia, amigos y fiesta. Acá hay mas laburo, pero todo sale más caro. Allá están los deseos de los que estamos acá y, allá también, están los recuerdos para los que estamos acá. Acá tenemos probablemente una de las ligas de fútbol más competitivas y atractivas. Tenemos al Barça, al Real Madrid, al Valencia o el Atlético. Pero siempre falta algo.
Porque somos humanos, y aunque nos falte o no, somos inconformistas por definición genética.
Son las ocho de la noche -tres horas más que en Uruguay- de un domingo cualquiera y corro hasta la computadora para conectarme y ver el fútbol. ¿Que digo fútbol?... ¡VER AL MANYA!
Ay, manya. ¡Cuantas te "manggiaste" desde que empezó el siglo!. Sin embargo uno sigue ahí. Esperando que te levantes. Alentando a que te levantes.
Por que tenés eso, Peñarol. Porque sos más que solo triunfos. Sos mucho más que fútbol. Sos parte de mi y de muchos más.
Y desde acá seguiré, a doce mil kilómetros de vos, reventándome la garganta en cada partido, esperando que te arrimes a mi y que me abraces. Y nuevamente llorar juntos; vos, yo y miles, al compartir la emoción de una nueva victoria."
Porque somos humanos, y aunque nos falte o no, somos inconformistas por definición genética.
Son las ocho de la noche -tres horas más que en Uruguay- de un domingo cualquiera y corro hasta la computadora para conectarme y ver el fútbol. ¿Que digo fútbol?... ¡VER AL MANYA!
Ay, manya. ¡Cuantas te "manggiaste" desde que empezó el siglo!. Sin embargo uno sigue ahí. Esperando que te levantes. Alentando a que te levantes.
Por que tenés eso, Peñarol. Porque sos más que solo triunfos. Sos mucho más que fútbol. Sos parte de mi y de muchos más.
Y desde acá seguiré, a doce mil kilómetros de vos, reventándome la garganta en cada partido, esperando que te arrimes a mi y que me abraces. Y nuevamente llorar juntos; vos, yo y miles, al compartir la emoción de una nueva victoria."
Agradecemos a Octavio Mazza, un uruguayo que hace algún tiempo emigró, pero que nunca cambió su sentimiento hacia el Carbonero.
3 comentarios:
Sensacional. O Peñarol é apaixonante
Es un sentimiento inexplicable, que Octavio expresa en forma certera, estando de este lado del océano, de qué nos sirve la calidad aquí si nuestro corazón está tan lejos, no?
Bueno, será cuestión de ajo y agua... a joderse y aguantar!
Gracias Octavio y Álvaro por compartirlo y perdonen por la palabrota, pero lo hice sólo para que el idiota soberbio de siempre no nos califique de intelectuales.
@Iuri: definitivamente es cierto, no caben dudas. Saludos.
@Jandro: gracias por tu comentario.Un abrazo.
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